En los pantanos del Sur profundo de los Estados Unidos, durante el periodo de la posguerra mundial, una familia encuentra un lugar donde vivir en una pequeña cabaña. El padre, la madre, tres hijos pequeños y sólo una barca para poder acceder a la casa, pues la comunicación a pie resulta complicada. El aislamiento, de hecho, es prácticamente total, y esto agrava los problemas de convivencia que no tardan en aflorar con un padre maltratador y borracho.



La primera en marcharse es la madre, que casi en shock abandona el lugar dejando atrás a sus hijos. Luego se larga el mayor, después el mediano… y al final solo se queda la pequeña Kya con su padre, siendo la única que parece capaz de entenderlo y domeñarlo.
La vida a la intemperie le ha otorgado un aire independiente y salvaje. Nunca escolarizada, desde su tierna infancia se ha ganado la vida por su cuenta cogiendo mejillones y vendiéndoselos a los tenderos de la tienda del pueblo, que resultan ser los únicos que parecen tenerle un poco de cariño. El resto de vecinos sencillamente la trata de loca, de salvaje, y le dan la espalda.
No obstante, uno de los chavales de su edad, ya llegada la adolescencia, empieza a interesarse por ella. Le enseña a leer y escribir, y promete volver a verla cuando termine sus estudios de biología en la Universidad. Sin embargo, no lo hace, y Kya cae en los brazos de otros chaval, más bruto y taciturno pero, aparentemente, bueno con ella.
El problema llega cuando su novio, que resulta ser de clase alta —y más alta, si cabe, en comparación con ella— aparece muerto en medio del pantano. Las autoridades no tienen dudas de que ella ha sido la culpable del crimen, y no tardan en atraparla y meterla en el calabozo. Afortunadamente, un viejo abogado decide ayudarla con su caso, pues está convencido de que ella es inocente. Y el espectador, también.
Vendida y promocionada como un thriller de intriga y suspense, la realidad es que la obra dirigida por Olivia Newman es un melodrama romántico. Si bien hay pequeños instantes de misterio, en líneas generales la película se centra en el relato en flashback de la infancia y pasado de ella, haciendo hincapié sobre sus amores de juventud y su vida siendo una niña iletrada en mitad de la nada del pantano.
Una historia de fotografía preciosista y atardeceres infinitos que se termina por hacer un poco aburrida pues, claramente a ojos del espectador, la protagonista es inocente. Aunque quizá no lo sea del todo…